El Pilar: Rubén Pinar, oreja al único bueno de Montalvo

15 de Octubre de 2009

Zaragoza, 6ª de abono. Excelente entrada. Corrida de Montalvo, fuerte, seria. De juego muy soso y de poco humillar. Deslucida toda menos el sexto, aplaudido. Abrió plaza un toro mansito con falta de ritmo y de fijeza. Fandi lo lanceó con aseo y lució en banderillas, normal. En la muleta ni el toro quiso ni el torero pudo más allá que demostrar sus ganas. Estocada y se hizo el silencio. La tarde se había roto con la frustración de la oreja negada, injustamente, otro robo de los maderos del palco, a Talavante. Ni el público ni los toreros se encontraban motivados, por que llovía sobre mojado. El Fandi se echó de rodillas para recibir a su segundo, ahí quedo todo. Fue el peor tercio de banderillas que se le recuerda, muy traseros los pares. El toro tuvo la arrancada muy corta. Fandi se justificó aunque mostrando no estar a gusto. Media estocada tendida, un aviso y descabello, para silenciarse nuevamente su labor.

Talavante con su primero, toro con media embestida adoleciendo de no humillar, le consintió parones y miradas para pasarle de muleta con temple y gusto, todo con mucha quietud. Lo mató y se pidió con fuerza la oreja que la terquedad del presidente hurtó al público. Parado, el quinto. Talavante le probó en todas las distancias sin opción posible más que justificarse y estar por encima. Lo mató de estocada y varios descabellos.

Pinar se llevó el lote. El tercero tuvo algo más de movilidad que sus hermanos anteriores pero la misma informalidad en sus movimientos. Poco toro para torero bisoño pero poderoso. Lució más en la distancia corta que permitía evidenciar la disposición que en el cite en la media distancia donde el toro pasaba y el torero lo resolvía sin más aquel que la limpieza y el aseo. Poca emoción y poca transmisión. Además lo pinchó. El sexto tuvo nobleza y más recorrido. Fijeza también. Buen toro. Pinar echó el resto atacando continuamente lo que hizo que el trasteo tuviera altos y bajos. Pero hubo ilusión y ambición de triunfo, y lo consiguió tras un pinchazo y estocada. Oreja.